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Seis meses sin ti.

  • Foto del escritor: Renata González
    Renata González
  • 18 jul
  • 2 Min. de lectura

No puedo creer que ya son seis meses sin ti pa.

Esto me confirma que el tiempo roba, el tiempo que viví contigo parece que se esfumo en el aire, como el humo del cigarro que fumabas todas las mañanas. Pero al mismo tiempo parece que fue ayer cuando te abrace por ultima vez hace un año y medio.

He aprendido mucho en este camino del duelo, y lo principal es que se vuelve muy solitario. Pero al mismo tiempo me he enriquecido como nunca, he madurado, he cambiado para bien, me he transformado en una gran versión de mi misma que lamentablemente nunca iba a poder alcanzar si no sucedía esto.

Así que entiendo por que decidiste irte, sabias que iba a estar bien sin ti, pero al mismo tiempo siento que nos falto tiempo.

El duelo son estas ideas que se mezclan entre si y unas encima de otras y quieres todo y nada al mismo tiempo, quieres apoyo pero no, quieres que te entiendan pero luego crees que nadie lo hace.

Pero esta situación en la que estamos, digo estamos por que se que estas aqui conmigo en mi proceso y viéndome sanar y lo harás siempre. y no por que yo quiera retenerte aquí, pero por que se que tu querrás quedarte a mi lado hasta que nos volvamos a reunir donde sea que estes, me ha traído muchas cosas buenas, amistades nuevas, alejar a las malas.

Por que llevo a cabo todas tus enseñanzas, siempre pienso: "¿Qué me diría mi papá?" o "¿Qué haría mi papá?" o "¿Si hago esto estará orgulloso de mi?"

Y me ha ayudado, hace unos días llegue a la conclusión que yo iba a estar bien. Por que realmente lo estoy, estoy mejor que hace muchos años cuando tu estabas conmigo. Soy mejor persona, soy mas fuerte y sigo mis sueños, creo en mi y en mis habilidades, aunque me hagas falta para alentarme se que estas ahí en cada mariposa que veo, en cada señal que me mandas.

Y siempre estarás en mi corazón.

Puedo sentir mi transformación en este proceso y puedo decir con seguridad que estas orgulloso de la mujer en la que me estoy convirtiendo.

Y te extraño, te veo al final del camino, al final del sueño y lo que trataré es de disfrutar mi vida cada día al máximo, sin remordimientos. Por que eso es lo que tu hubieras querido.

Y te siento, te siento a mi lado y eso me hace feliz por que se que no estoy sola nunca.

Te amo para siempre.

Renata.


 
 
 

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